Cartografía de linea

Cartografía de linea

En la Dirección de Cartografía se procesa la información de la base de datos institucional. A esta información se la convierte en archivos CAD, (se trabaja con software específico) y se realiza la edición cartográfica propiamente dicha.

Esta edición consiste en colocar todos los patrones de las líneas, de las áreas y los signos o símbolos que corresponda según su posición geográfica. Todos los topónimos que corresponda de la altimetría, hidrografía y planimetría incluyendo los centros poblados según su importancia y cantidad de habitantes según la escala de trabajo.

Dicha edición se realiza con los parámetros establecidos en el Manual de Signos Cartográficos y con normativas internas para casos especiales que no están contempladas en el Manual.

Estas tareas se dividen en tres grandes grupos:

  • Cartografía de levantamiento, en la cuál se procesa la información a escalas 1:100000, 1:50000 y 1:25000, manteniendo el corte geodésico basado en la Proyección Gauss-krüger generando las Cartas topográficas o de líneas.
  • Cartografía a escalas menores, esta se genera mediante la compilación de la información obtenida por la cartografía de levantamiento, obteniendo las escalas 1: 250000 y 1: 500000.
  • Actualización de cartografía y trabajos especiales. La actualización se genera cuando se recibe la información de otros sectores. Los trabajos especiales son Mapas con la información solicitada por el cliente, Atlas geográficos y Atlas a escalas determinadas.

Productos:

  • Cartas de línea o topográficas a escalas 1:25000, 1:50000, 1:100000, 1:250000 y 1:500000.
  • Mapa Bicontinental de la República Argentina - Escala 1:5000000.
  • Mapa Físico del Sector Continental Sudamericano – Escala 1:2500000.
  • Mapa Catamarca – Escala 1:1000000 y 1:500000
  • Planisferio – Escala 1:28000000.
  • Atlas Geográfico de La República Argentina – Edición 2011.
  • Argentina 500k – Todo el país en un libro a escala 1:500000 con información de cartografía de línea e imagen.

Venta de productos

Evolución de la cartografía en las últimas décadas

Breve cronología histórica

A través de los años el mapa de la República Argentina tuvo cambios internos como territorios nacionales que hoy son provincias, reasignación de territorios o renombramiento de algunas como Chaco que paso a llamarse “Presidente Perón” o La Pampa “Eva Perón” allá por 1951 hasta 1956 que vuelve a denominarse como la conocemos ahora.

Con esta breve introducción lo que se debe entender es que nuestra representación cartográfica no sólo está modificada por rasgos geomorfológicos y/o topográficos sino influenciada por cuestiones políticas económicas y culturales, acompañada por la evolución de la tecnología y los métodos de representación que en las últimas décadas ha cambiado radicalmente gracias al desarrollo de la informática.

Haciendo historia del trabajo cartográfico en el Instituto Geográfico Nacional, durante la década de los setenta, la captura de datos a partir de vuelos fotogramétricos era con estaciones analógicas como por ejemplo el Wild B8, B9, A9 o A10 de muy complejo mantenimiento y elaboradas calibraciones. Algunas de ellas estaban adosadas a pantógrafos mecánicos que según la escala a representar se debían cambiar engranajes. Todo esto en el marco de grandes trabajos de campo de tiempos extensos y gran cantidad de personal técnico desarrollando triangulaciones de distintos ordenes, poligonales, nivelaciones o trabajos de plancheta.

La conjunción de estos procesos permitía que los cartógrafos editaran una carta topográfica a escala 1:50.000 o 1:100.000 casi artesanalmente. Aquellos profesionales tenían grandes aptitudes en dibujo técnico para poder plasmar la simbología y detalles planialtimétricos de acuerdo al Reglamento de Signos Cartográficos y exigencias de cada proyecto, dándole una impronta artística a nuestra cartografía base.

A comienzo de los ochenta, y con el advenimiento de las nuevas tecnologías, aparecieron los primeros instrumentales analíticos como los sistemas de fotogrametría Planicomp C100 y C120 de Carl Zeiss. Los mismos contaban con computadoras de última generación como la HP 1000 de Hewlett Packard de 8 kbytes de ram y disco rígido de 20 megabytes. Aparece instrumental de campo más sofisticado como niveles teodolitos, distanciómetros electrónicos y las primeras estaciones totales estableciendo un sistema cartográfico semi-analítico de edición, a partir de una mesa de ploteo donde se grababan originales (mesa Kongsberg). Esto permitió los primeros procesos digitalizados que se transformaban en originales grabados en materiales especiales (Stabilenes y Cut’n) para terminar el proceso foto-mecánicamente.

En aquellos años los originales de topónimos se confeccionaban manualmente a partir de tipografías impresas en materiales autoadhesivos y luego se obtenían, por proceso fotográfico, el material necesario para la impresión.

Promediando los noventa aparecieron las primeras PC con sistema operativo Windows y software de CAD (diseño asistido por computadoras), el Microstation de Bentley y otros complementarios como el Cadscript que permitía generar un archivo apto para los sistemas de impresión. Esto dio lugar a que todos los originales cartográficos partan de una base vectorial generados en una computadora.

En los comienzos de este nuevo siglo la edición de la cartografía se limita a estaciones de trabajo que constan de una PC y el software apropiado para el desarrollo de la carta soporte digital, la cual genera un producto adecuado para la impresión. La evolución de las PC, en cuanto a su capacidad y funcionabilidad, permite generar productos más elaborados y de mayor complejidad.

Sumado a esto, la tecnología de hoy en día - que es de mayor precisión y de disponibilidad casi inmediata - permite una mejor interpretación y desarrollo de los trabajos de campos.

En la actualidad nos preguntamos ¿es necesario el soporte papel en la cartografía base, dado que hasta en un simple celular contamos con un navegador satelital o GPS? De acuerdo con la misión del Instituto Geográfico Nacional es nuestra obligación generar el “documento” para la cartografía base y como tal debe estar impresa, dando las garantías suficientes para generar la obligación de que cualquier producto cartográfico este basado en ellos.